top of page

Reflexión 0012 ¿Quién es la mujer? o El mito de la mente abierta.

 

Un puto cualquiera
diciembre 20, 2015

La comunidad LGBTTTI se ha promovido por mucho tiempo como una sociedad de apertura a otras maneras de vivir la sexualidad y con ello a otros estilos de vestimenta, de actitudes, de personalidades y hasta de estilos de vida, hablar de ser un individuo de mente abierta implica estar abierto a romper los paradigmas de la vida, de dejar atrás el concepto de la familia como modelo tradicional de padre, madre e hijos, en búsqueda de la aceptación del modelo de dos hombres o dos mujeres o dos padres e hijos o dos madres e hijos.

 

¿Pero ésta comunidad en verdad demostramos y vivimos la apertura mental de la que tanto presumimos?, yo mismo quisiera asegurarlo pero tal parece que se trata sólo de una creencia colectiva, porque no somos de mente tan abierta como creemos, algunos sólo podemos presumir que hemos roto el estereotipo de la pareja heterosexual.

 

Muchos de nosotros pensamos que los homofóbicos cierran su mente a otro tipo de uniones que no sean de índole heterosexual, pero muchos de nosotros tampoco podemos considerar que las personas bisexuales puedan estar enamoradas de personas de ambos sexos, que haya gente que guste de vestirse como el sexo opuesto o que un hombre al establecer un rol pasivo durante el acto sexual deba ser considerado como igual en una relación homoparental y quizá no nos hemos dado cuenta que la pregunta heterosexual que algunos tachamos de absurda mientras nuestra cara se llena de incredulidad, no ha podido ser superada por nosotros mismos.

 

¿Y quien  es la mujer?, ¿o acaso no la hemos escuchado varias veces?, y la respondemos con mucha naturalidad aclarando que en una relación homoparental ambas personas son hombres y que en realidad una relacion homoparental no se trata de asumir roles tradicionales como nos han enseñado acerca de lo femenino y masculino, que de tal manera no es necesario asumir los roles del ama de casa y el jefe del hogar, sin embargo a lo que todos se refieren es al rol sexual, ¿qué pasa en las camas?, porque lo que a los heterosexuales lo que les causa ruido en sus cabeceras es el rol sexual, o lo que nosotros solemos llamar activo, pasivo o ínter y allí es donde cualquier argumento se cae porque por más que busquemos dignificar cualquiera de las 3 figuras, hay que explicar la manera en que se basan las relaciones entre dos personas del mismo sexo.

 

Yo por ejemplo, explicaba a algunos amigos que con el último novio con el que duré alrededor de 4 años, nuestras relaciones sexuales y de contacto físico estaban basadas casi en exclusiva en la masturbacion debido a que ambos deseábamos tomar el rol activo y muy pocas ocasiones intentamos la penetración, la verdad es que encontrábamos una gran satisfacción en la masturbación y a veces también en el sexo oral.

 

Sin embargo, aquí el asunto es aclarar el por qué pesa sobre la figura pasiva una gran nube de inferioridad y para una mente abierta a la igualdad, esto no debería suceder, la figura pasiva es tan valiosa como la activa porque sin una no se puede complementar la otra, sin la una no existe la otra, la inferioridad solo es percibida en nuestra cabeza y en la educación que la sociedad heterosexual machista ha construido desde que la figura de la mujer fue desestimada de su rango divino a un puesto inferior al del hombre, figura  de la que no nos hemos podido desprender y que bajo esos términos no podemos hablar de haber alcanzado una apertura mental y mucho menos aún una madurez mental.

 

Antes de decir que somos de mente abierta debemos dejar de decirnos - pasivas-  para ofendernos aunque sea en broma, de decir que somos- todas unas mujeres- para desestimarnos, porque hoy más que nunca debemos reconocernos como individuos iguales, porque para eso nos consideramos una comunidad  que busca la igualdad ante otra comunidad que cree ser la mayoría y que cree que "lo normal" es la figura heterosexual y para lograrlo, no sólo es necesario respetarnos, es nuestra primera obligación como miembros de la comunidad.

 

La comunidad gay cree que es la comunidad de las libertades, de decir lo que sea y hacer lo que sea, pero si nos consideramos miembros de un grupo, primero debemos entender que en todas las sociedades, hay reglas y obligaciones, y la primera con la que debemos comenzar es  respetarnos a nosotros mismos como comunidad, de respetarnos como miembros, de vernos como iguales y de ayudarnos.

 

Es necesario comenzar a aceptar que el mundo tiene una tonalidad infinita que no se divide en varoniles y afeminados, en heterosexuales y homosexuales, en güeros y morenos, en delgados y musculosos, en osos y cazadores, en con estilo y sin estilo, en fácil y difícil, y en ricos y pobres, (aunque la tonalidad aquí sea cada vez más inexistente); porque cuando en verdad tengamos la mente abierta para aceptar que somos diferentes en muchas más circunstancias de las que pensamos y nos pongamos en los zapatos de los demás, entonces podremos aceptarnos más e iniciar un camino con dirección hacia la comunidad diversa que tanto deseamos y que en la realidad aún no existe pero que desde décadas atrás se ha conformado de manera imaginaria.

 

 

 

 

Un puto cualquiera

 

reflexionesdeunputocualquiera@gmail.com

https://www.facebook.com/pooto.cualquiera

© 2023 by The Book Lover. Proudly created with Wix.com

  • Google+ B&W
  • Black Facebook Icon
  • Twitter B&W
bottom of page